- Tras la destitución de Xisca Mora como Portavoz del PI en el Consell Insular, llevada a cabo por parte de sus otros dos compañeros de grupo.
- Las manacorinas Bel Febrer y Cati Riera figuran en el documento que revela la dirección del nuevo partido político que los perdedores del Congreso planean poner en marcha.
Este diario digital era el único medio de comunicación de Manacor que, el 25 de septiembre, recogía en una noticia que titulaba «El Pi se parte por la mitad y la ex-alcaldesa Cati Riera queda fuera de la dirección regional» la celebración de su Congreso Regional ese mismo día.
Informabamos que dicho Congreso se había celebrado en el polideportivo de Campanet y que la candidatura del «sector melianista» había derrotado a la del «sector fontista» (en la que figuraba la manacorina Cati Riera) por un resultado de 300 votos contra 229. Es decir, un 56,71% frente a un 43,29%.
Finalizabamos la noticia afimando que el Pi continúaba «más dividido que nunca». Y afirmabamos que «Ahora sólo queda ver si los derrotados aceptan su derrota y si los ganadores integran a los vencidos. Ya sólo cabe esperar acontecimientos».
Cuando no había transcurrido ni un mes desde la celebración del Congreso Regional la candidatura perdedora informaba, mediante una nota de prensa enviada a los medios de comunicación el 20 de octubre, que había denunciado ante la Oficina Anticorrupción de Baleares supuestas irregularidades que, según ellos, se habrían producido en el mismo. Como, por ejemplo, el pago de cuotas de afiliados desde una cuenta corriente de un grupo político municipal.
El 18 de noviembre la nueva ejecutiva del PI decidía sustituir a la persona que ocupa el cargo de asesor del grupo del PI en el Consell Insular y dos de los tres consellers que forman el grupo del PI en el Consell (Pere Soler y la manacorina Bel Febrer, ambos integrantes del sector derrotado) protestaron.
La noche del 25 de noviembre los dos Consellers recibieron una carta del presidente del partido, Tolo Gili, en la que se les amenazaba con abrirles un expediente disciplinario. Al día siguiente los consellers rebeldes destituian (unilateralmente y a espaldas de la dirección del partido) a la que hasta el momento era la Portavoz (la oficialista Xisca Mora) y nombraban a uno de ellos (Pere Soler) como nuevo portavoz.
El 30 de noviembre la dirección del PI nombraba a los nuevos integrantes del Comité de Conflictos para que dicho órgano pudiése estudiar si los Consellers rebeldes habían vulnerado los estatutos del partido al cesar a la que hasta ese momento había sido su portavoz y que, además había sido ratificada por la nueva ejecutiva. Al mismo tiempo la ex-portavoz afirmaba que «su objetivo (el de los rebeldes) es romper el PI, no han aceptado el resultado democrático del pasado congreso«.
Este pasado miércoles, 8 de diciembre, oficialistas y rebeldes enviaban sendas notas de prensa a los medios de comunicación en las que ponían de manifiesto que la guerra interna en el PI no sólo no se detenía sino que iba en aumento. La dirección del Pi ratificaba a Xisca Mora como su portavoz en el Consell de Mallorca.
El jueves, 9 de diciembre, la dirección del PI tildaba directamente de «tránsfugas» a los dos consellers rebeldes y la cesada Xisca Mora acusaba a sus compañeros de partido de querer formar un nuevo proyecto político.
Ayer viernes, 10 de diciembre, se confirmaba lo que ya era un secreto a voces y se hacía público el documento secreto con los pasos a dar por los perdedores del Congreso del Pi, los autodenominados «Aire fresc». En dicho documento se incluye el reparto de cargos en el nuevo partido así como el calendario a seguir, siendo el 31 de marzo del año que viene la fecha de «presentación del proyecto» y figurando las manacorinas Cati Riera y Bel Febrer como integrantes de la dirección del nuevo partido.
Este digital se puso ayer en contacto con Bel Febrer informándole de la intención de publicar una noticia al respecto por si quería explicar su punto de vista, o decir lo que considerse oportuno, pero hasta el momento no hemos recibido ninguna respuesta.