Este pasado sábado, 14 de mayo a las 21:00 horas, se hizo entrega de la A de Oro de s’Agrícola al actor Toni Gomila Nadal en el convento de san Domingo de Manacor

Hay que recordar que este galardón está destinado a distinguir a entidades y personas de Manacor que se han significado por alguna actividad social, profesional, deportiva o cultural.

La A de Oro empezó a entregarse en 1983 y, salvo algún año que no ha sido posible por causas diversas, se ha ido entregando anualmente hasta el 2019.

Ahora, después de una interrupción debida a la Pandemia, s’Agrícola ha reanudado la entrega de este galardón que representa la máxima distinción que otorga la entidad cultural.

Mª Magdalena Gelabert, galardonada con el A de Oro el pasado 2019, condujo el acto con la eficacia y la exquisita solvencia que la caracterizan.

La jovencísima actriz Catalina Sureda inició el acto recitando un monólogo de Shakespeare, situado en el momento en que Hamlet dice a los tres actores que deben intervenir en una obra la forma en que deben recitar y actuar.

A continuación, Catalina Duran Julià, graduada en Traducción, Interpretación y Lenguas Aplicadas, hizo la presentación del galardonado hablando de Toni Gomila en un tono distendido y divertido muy adecuado a las características del homeneado, muy cuidado en las formas y la redacción.

El abogado Toni Frau, secretario de la entidad cultural, hizo lectura oficial del acta de nombramiento, y después, Miquel Oliver, alcalde de Manacor, entregó la placa distintiva a Toni Gomila Nadal.

Finalmente, Llorenç Femenies, presidente de s’Agrícola, colocó la A de Oro en la solapa del homenajeado, una acción aparentemente sencilla que tuvo que completar Mª Magdalena Gelabert, la conductora del acto, alentada por los aplausos del numerosísimo público asistente.

Toni Gomila Nadal agradeció la distinción con un brillante y realista parlamento mediante el cual estableció un paralelismo entre el señorío clasista que vivieron sus abuelos y bisabuelos durante los inicios de la entidad, y el «señorio» social y cultural que , según afirmó, despliega actualmente S’Agrícola.

El contenido, el nivel expresivo, las pausas y la puesta en escena del parlamento, confirmaron una vez más la calidad declamatoria del actor, así como la proximidad que sabe establecer con el público, dos innegables virtudes que le han convertido en un personaje reconocido, admirado y amado en todas partes.

Finalmente se ofreció un suculento aperitivo servido por Aproscom en el claustro anexo al Convento.

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