Los “mocktails” son bebidas diseñadas para parecer cócteles, pero sin contener alcohol. Estas bebidas están especialmente pensadas para aquellas personas que por alguna razón (embarazo, conducción o simplemente una decisión personal) no desean o no pueden consumir alcohol.
Hay muchas combinaciones creativas que pueden probarse y que resultan una excelente opción para disfrutar de una bebida refrescante, sin peligro de coger el coche.
El concepto de mocktails tiene una larga historia, ya que existen registros de bebidas no alcohólicas o “cócteles sin alcohol” que datan del siglo XIX. Estas bebidas se hicieron populares durante la prohibición en Estados Unidos de venta y consumo de alcohol de entre 1920 y 1933.
Su popularidad ha aumentado mucho en las últimas décadas gracias a la creciente conciencia sobre la salud y el bienestar. Muchos bares y restaurantes ofrecen ya opciones de mocktails elaborados con ingredientes creativos y sofisticados que hacen que estas bebidas sean igualmente atractivas y deliciosas para todos.
Algunos de los mocktails más conocidos son:
Virgin Mojito: La versión sin alcohol del clásico mojito, que incorpora menta, limón, azúcar y soda para crear una bebida refrescante.
Nojito: Es una variante del Daiquiri, elaborado con zumo de limón, zumo de limón y azúcar de caña.
Shirley Temple: Una bebida dulce que combina refresco de limón con granadina y espuma de limón.
Piña Colada sin alcohol: Una versión no alcohólica del conocido cóctel tropical, que incorpora zumo de piña, leche de coco y hielo.
Mocktail de margarita: Con sabor a margarita, pero sin tequila. Se hace con zumo de limón, zumo de pomelo y un poco de jarabe de agave.
Bellini sin alcohol: Una opción no alcohólica del cóctel italiano, que zumo de melocotón con zumo de limón y soda.
Virgin Mary: Una variante del Bloody Mary, que utiliza zumo de tomate, zumo de limón, salsa Worcestershire, salsa Tabasco, sal y pimienta.