Sorprende que mientras en el resto de Mallorca se organizan controles policiales anti-botellón, aquí el Ayuntamiento de Manacor mira hacia otro lado.
Este pasado lunes un lector de Digital Manacor se puso en contacto con nosotros para denunciar que la madrugada del sábado al domingo había sido testigo de la realización de botellones en Manacor.
Por motivos obvios mantendremos su identidad en el anónimato pero si que transcribiremos textualmente la información que nos ha facilitado:
«Era sobre la una y media de la madrugada del domingo. Yo regresaba a Manacor de ver la Feria de Porto Cristo y observe bastante tráfico de personas que atravesaban desde la gasolinera de la ronda de felanitx hacia los descampados (polígono agroalimentario).
También pude observar como muchos otros parecían seguir la misma dirección y estos venían desde la plaza de ses perleras. Casi todos, por no decir todos iban con bolsas de plástico.
Me detuve en el paso de peatones y pasaron unos 9 o 10 jóvenes que debían tener entre 16 o 17 años de edad.
Por lo que me pude fijar la mayoría no llevaban mascarillas y los pocos que las llevaban puestas las llevaban por debajo de la boca. Respecto a la distancia social, ninguna. Cero. En total yo pude ver a unos 35 jóvenes pero seguramente había muchos más».
Puestos en contacto con varias empresas situadas en el Polígono Agroalimentario nos han confirmado que los fines de semana se están produciendo botellones en las inmediaciones de las mismas ya que encuentran restos que lo evidencian. También creen que los botellones deben de ser multitudinarios por la cantidad de basura que se acumula.
Cabe esperar que el Ayuntamiento de Manacor y, sobretodo su Alcalde (y al mismo tiempo máximo responsable de la policía local ya que no nombró a ningún Delegado de Policía, hecho que no se produce desde hace muchísimas legislaturas) Miquel Oliver, ordene el pertinente dispositivo policial para que se cumpla la ordenanza local que prohibe los botellones y así evitar que este proximo fin de semana, y otros, se vuelvan a hacer.
Ante hechos incívicos como estos no debería hacer falta recordar, máxime teniendo en cuenta el repunte de contagios por Coronavirus, que está en juego la salud y la economía de todos los «manacorins». Y con según que cosas no se juega, ¡o no se debería jugar!».