Digital Manacor informaba el 22 de noviembre del pasado año que el PP de Manacor exigía al Ayuntamiento que reabriese la piscina municipal.

La portavoz del grupo municipal del PP de Manacor decía que era «evidente que el equipo de gobierno no hacía nada más que tomar malas decisiones al respecto» ya que «desde el principio se sabía que este tema no tenía ningún recorrido judicial» y recordaba que «la justicia ya se habia pronunciado en contra del Ayuntamiento en tres ocasiones«.

A pesar de ello el alcalde Miquel Oliver ordenó a los servicios jurídicos del Ayuntamiento de Manacor recurrir nuevamente ante la Sala de lo Civil del Tribunal Supremo y estos, como informaba ayer Digital Manacor perdían el recurso. Un hecho que supone que se condenaba al Ayuntamiento a pagar 1.200.000 euros (intereses de demora y gastos de recursos incluídos).

Una providencia de la Sala de lo Civil del Tribunal Supremo contra la que no cabe recurso de ningún tipo ya que es definitiva y que, en una nueva exclusiva de Digital Manacor, los lectores pueden leer a continuación en formato pdf:

Aquellos lectores que así lo deseen también pueden disponer de la providencia, en formato jpg, a continuación:

La opinión de Digital Manacor

Los ciudadanos de Manacor no podemos disfrutar de la piscina municipal desde hace aproximadamente unos cuatro años, gracias a la cabezoneria del alcalde y su equipo de gobierno de MÉS-ERC y AIPC-SyS. Aunque cabe recordar que el PSOE de Núria Hinojosa también tiene una gran parte de responsabilidad ya que cuando se inició todo este «embrollo» formaban parte del equipo de gobierno.

Por desgracia esa cabezonería la tendremos que pagar todos los ciudadanos y no Miquel Oliver y todo su equipo de gobierno, como sería lo justo. Si se hubiése pagado cuando tocaba no se tendrían que pagar intereses de demora, costas judiciales ni los honorarios a abogados y procuradores.

Pero lo peor de todo es el tiempo que los manacorins llevamos sin poder disfrutar de la piscina, además del tiempo que aún quedará para arreglar los desperfectos de la misma (producidos por la falta de mantenimiento).

Ya que, por suerte para el y por desgracia para los manacorins, el alcalde Miquel Oliver no está obligado a pagar de su bolsillo sus erróneas decisiones, desde Digital Manacor no nos queda más que darle un más que merecido «tirón de orejas».

A ver si de una vez por todas al alcalde se le mete en la cabeza que el Ayuntamiento de Manacor no es su cortijo personal y que no somos los manacorins quienes tenemos que pagar sus caprichos y cabezonerias.

Amables lectores de Digital Manacor, llamennos ilusos pero de ilusiones también se vive, o eso dicen, ¿no?.

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