El Ayuntamiento de Inca ha puesto en marcha un estudio sobre el uso de las pantallas entre los niños de 0 a 6 años. La finalidad de este proyecto es conocer la situación actual para poder definir futuras intervenciones dirigidas a mermar las consecuencias del abuso de las pantallas y la importancia de prevenir problemas de salud mental.
«La exposición a pantallas entre menores, como tabletas o teléfonos móviles, es una constante que podemos ver todos los días a todas horas. Por eso, hemos considerado adecuado impulsar este proyecto para conocer de primera mano cuál es la realidad y, después, analizar si es necesario poner en marcha actuaciones específicas», explica la regidora de Servicios Sociales, Maria Antònia Pons.
Así pues, actualmente está en marcha un cuestionario para familias con niños de 0 a 6 años para analizar el uso que se hace de las pantallas entre los menores, para así obtener datos relevantes sobre esta temática que permitan analizar la realidad como punto de partida para futuras intervenciones. En colaboración con el grupo de investigación GREID de la Universidad de las Islas Baleares, se ha creado una herramienta muy intuitiva y de fácil acceso, la cual se puede cumplimentar con el propio móvil.
El plazo para participar en esta primera etapa del estudio finaliza el 10 de julio. Éste es el enlace del cuestionario: https://forms.gle/zg7pZF9z1Y613D58A. Actualmente, ya se dispone de una muestra de más de 300 personas.
Por último, cabe destacar que la infancia es una etapa determinante en el desarrollo. Los menores de 0 a 6 años atravesan un período de rápido crecimiento y maduración, tanto física como mentalmente. Durante esta fase, sus cerebros están en constante desarrollo y son altamente sensibles a las influencias externas. Es fundamental, por tanto, proporcionar un entorno que promueva un desarrollo saludable y un espacio de benestar frente a un entorno lleno de estímulos que pueden tener efectos negativos.
Se ha demostrado que el uso excesivo de pantallas afecta al desarrollo del lenguaje, la calidad del sueño, la actividad física y las habilidades sociales. Además, puede crear una dependencia temprana de la tecnología, lo que es preocupante en una sociedad cada vez más digital. Por tanto, en la medida de lo posible, en lugar de justificar el uso de pantallas en este grupo de edad, es fundamental promover actividades que fomenten la interacción social, el juego activo, la exploración y la comunicación cara a cara. Estas prácticas apoyan un desarrollo saludable en los primeros años de vida.
Para el desarrollo de este proyecto el Ayuntamiento de Inca trabaja conjuntamente con expertos de la UIB, el equipo de pediatría del Centro de Salud Es Blanquer, la escuela infantil Toninaina y los servicios sociales Comunitarios Básicos.